Dos autoras valencianas han decidido mirar hacia uno de los espacios donde nacen muchas vocaciones musicales —las escuelas y bandas— y plantearse una pregunta fundamental: ¿hasta qué punto la elección de un instrumento está condicionada por los estereotipos de género? La respuesta llega en forma de literatura infantil con Quin serà el meu instrument?, un cuento destinado a niñas y niños de entre 3 y 7 años que busca romper los prejuicios que todavía persisten en el mundo musical.
El libro, escrito por Marta Herrero Herrero y Lucía Saiz Alegre, con ilustraciones de Núria Poveda y editado por Musicate, nace en el marco de las Residencias Artísticas del Ayuntamiento de València. Su objetivo es doble: acercar la música a la infancia de una manera amable y divertida, y al mismo tiempo invitar a reflexionar sobre la igualdad y la libertad de elección en el ámbito instrumental.
El origen: investigación, experiencia y banda
La gestación del proyecto está estrechamente ligada al trabajo previo de Marta Herrero, agente de igualdad y socióloga, que desde hace años investiga el papel de las mujeres en las bandas de música, imparte talleres y analiza desigualdades históricas dentro del ámbito bandístico. Esa mirada crítica, unida a la experiencia de ambas autoras como músicas, derivó en una conclusión clara: era necesario llevar el debate a edades tempranas, en un formato accesible y cercano.
Su investigación pone de relieve cuestiones muy presentes en el día a día de las agrupaciones: la falta de referentes femeninos visibles, la invisibilización histórica de las mujeres intérpretes y la tendencia a asociar determinados instrumentos con chicos o chicas.
Tal como explica Herrero, el momento de escoger instrumento “suele estar cargado de estereotipos: los instrumentos grandes o graves se vinculan con los hombres, mientras que los dulces o suaves se asocian a las mujeres”. Este reparto simbólico no es inocente —añade—, porque marca la presencia femenina en determinadas formaciones e incluso en espacios como las charangas, donde algunos instrumentos siguen siendo mayoritariamente masculinos.
Una protagonista con tuba y sin etiquetas
El cuento narra la historia de una niña que quiere tocar la tuba, uno de los instrumentos más cargados de estereotipos de género dentro de las bandas. La elección no es casual: es una invitación directa a romper prejuicios y a mostrar que no existen instrumentos “de chicos” o “de chicas”, sino personas con intereses, sensibilidad y talento propios.
Las autoras subrayan que la intención es que niñas y niños puedan identificarse con referentes femeninos y entender que la música —como cualquier otro ámbito cultural— debe ser un espacio de libertad.
El lenguaje sencillo, el tono cercano y las ilustraciones contribuyen a crear un relato que, además de leerse y disfrutarse, abre la puerta a conversaciones en familia y en el aula sobre igualdad, diversidad y participación plena en las agrupaciones musicales.
Educar en igualdad desde la música
La publicación de Quin serà el meu instrument? enlaza con un debate que atraviesa el mundo bandístico actual: cómo garantizar que las nuevas generaciones crezcan libres de sesgos heredados, reconociendo el papel de las mujeres en la historia musical y ampliando los referentes disponibles.
