Spanish Brass es un quinteto de metal formado por Carlos Benetó (trompeta), Juanjo Serna (trompeta), Manolo Pérez (trompa) Indalecio Bonet (trombón) y Sergio Finca (tuba). Juntos forman uno de los grupos de cámara más dinámicos y consolidados del panorama musical.
Desde su nacimiento han tenido una clara vocación internacional, y es fuera de las fronteras de España donde han obtenidos algunos de sus reconocimientos, como en 1996 cuando obtuvieron el Primer Premio del 6º Concurso Internacional para Quintetos de Metales Ville de Narbonne (Francia), considerado el más prestigioso de esta formación. En 2017 recibieron el I Premio Bankia al Talento Musical en la Comunitat Valenciana y en 2019 el Premio Espai Ter de Música de Torroella de Montgrí. Tienen en su haber cuatro premios Carles Santos otorgados por el Instituto Valenciano de Cultura, por sus CD XXX y Mira si hem corregut terres… (2019), Les Aventures de Monsieur Jules (2020) y Spanish Brass (a) LIVE (2021).
En 2020 recibieron el Premio Nacional de Música en la modalidad de Interpretación que otorga el Ministerio de Cultura de España.
Además de haber publicado treinta trabajos discográficos, han participado en algunos de los festivales más importantes de música, y realizan giras por todo el mundo, tocaron en la gala de los Premios Príncipe de Asturias en 1995 y han grabado la música de la obra teatral La Fundación de Buero Vallejo para el Centro Dramático Nacional y la banda sonora de la película Descongélate, de Félix Sabroso.
Pero no se detienen ahí, ya que los miembros de Spanish Brass organizan dos festivales dedicados a los instrumentos de metal de carácter internacional: el Festival Spanish Brass Alzira y el Brassurround, donde se reúnen cada año destacados solistas internacionales, grupos y profesores de contrastado nivel.
En Al Compàs hemos compartido el tiempo previo a un ensayo con ellos, para profundizar en su trabajo y en sus raíces, sus comienzos en diferentes sociedades musicales.
Al Compàs: ¿Cuáles fueron las sociedades musicales en las que os iniciasteis?
Carlos Benetó: Yo me crié en la Societat Musical la Lira Castellonera. Y estoy orgulloso de esas raíces, de ese origen y en realidad estoy muy vinculado a esa Sociedad.
Inda Bonet: Mis inicios fueron evidentemente en la sociedad musical la Lira de Vila-real, pero al poco tiempo, bueno, me fui a la banda Santa Cecilia, de Onda, y empecé con el bombardino a los 7 años.
Juanjo Serna: Mi banda es la de Albuixech.
Manolo Pérez: Mi sociedad es la de Guadassuar. Comencé en la escuela y luego en la banda, a los 8 años con la trompa.
Sergio Finca: Yo a diferencia de mis compañeros vengo de Asturias con la suerte de que también he crecido en una sociedad musical, en este caso es de la Asociación de Pola de Siero y tuve la suerte, cuando entré a formar parte de la banda, que en esa época había muy buena energía entre los músicos y se creó muy buena cantera.
Al Compàs ¿Continuáis teniendo contacto con las bandas de vuestros inicios?
CB: Ayer mismo hice un ensayo con ellos. Siempre que puedo voy, para mí también es la excusa perfecta para ir al pueblo. Estoy muy vinculado, mis amigos son de allí, y también aprovecho para visitar a mi padre.
Al Compàs ¿Qué recuerdos tenéis con vuestras bandas?
IB: Yo puedo recordar los ensayos de martes y viernes a las diez de la noche que para un niño de 9 años era como irte de fiesta. Y claro, irte con tu padre y tu hermano y poder hacer música pues es guay, ¿no?
JS: Mi abuelo era clarinetista y quería que yo también lo fuera, pero era tan pequeño que no llegaba a tocar bien las claves. Trató que tocase el requinto, pero tampoco, y tenía un hermano, mi tío Miguel, que tocaba la trompeta, y le dije que quería tocar como él. Y desde ahí hasta ahora. Empecé a formar parte de la banda cuando tenía 7 años.
MP: recuerdo que los instrumentos eran muy viejos y recuerdo la primera vez que salí a desfilar con la banda, entre mirar la partitura, mirar el suelo… Me choqué con los de adelante, me tropecé…, imagino que un poco lo que les pasará a los chicos de hoy en día. Mi familia estaba super orgullosa, y yo muy ilusionado.
Al Compás: ¿tenéis algún proyecto con alguna sociedad musical actualmente?
JS: No paramos de hacer cosas de banda. Desde hace muchísimos años hemos tenido la suerte de colaborar con muchísimas bandas, tanto amateurs como profesionales. Hace poco hemos terminado un proyecto con la Banda Municipal de València.
CB: Es muy enriquecedor trabajar con sociedades musicales y bandas amateurs en las que ves que el músico que toca a tu lado quiere aprender y se siente orgulloso.
Al Compàs ¿Qué es lo más importante que ofrecen las sociedades musicales?
IB: Lo más importante es toda esa red social y cultural que hay en torno a las sociedades musicales y a las escuelas de música. No creo que exista una zona en la que puedas recibir esa formación durante los primeros años de tu vida. Y es importante que se cuide y que se siga reforzando, valorando y creyendo en eso.
JS: En el caso de los valencianos tenemos la suerte de tener una plataforma que nos hace conscientes desde muy jóvenes de lo que significa la música para cada uno y eso son muchos años de ventaja. De hecho, para mi esa ventaja es lo mejor que me ha pasado nunca.
SF: Esto es algo muy particular de Valencia y creo que es un tesoro que se debería mimar mucho porque estas sociedades van mucho más allá de un aprendizaje musical, es algo que está muy dentro de cada pueblo. Es algo socialmente muy muy importante y que se cuida muchísimo y cuando tú vienes de fuera y lo ves es impactante, es importante que la música esté tan enraizada dentro del ente asociativo de cada pueblo.
CB: Cuanto antes entendamos ese sentimiento de pertenecer a un sitio, que en este caso son las sociedades musicales, mejor. Es una unión que nos hace compartir y ser más respetuosos y no corresponde sólo a las instituciones transmitir ese sentimiento, sino los propios músicos, porque de esta manera estamos protegiendo a las sociedades musicales, que lo necesitan.
